Este es un asesino cruel y silencioso del amor
Lo dijo el padre del psicoanálisis Sigmund Freud y es una frase que no puede ser más certera: Lo contrario del amor no es el odio, es la indiferencia.
Es la manera más cruel de terminar con el amor, es un asesino lento y sigiloso si tú lo permites. La ausencia total de emociones se llama indiferencia. Es una actitud que va haciendo daño de forma continua a la pareja, la persona que es víctima de esto vive una de las peores formas de sufrimiento.
Todos los seres humanos tenemos la necesidad de cuando estamos en una relación, sentirnos amados y valorados. Cuando tu pareja, lejos de darte atención, es alguien frío, que no tiene apego contigo, es insensible a tus sentimientos, es una indiferencia que lastima, un dolor que va acabando con el amor que puedes sentir por el otro.
La necesidad de tener el control, ser infiel, la desilusión y la costumbre son factores que favorecen el surgimiento de la indiferencia. Si permites que pase mucho tiempo sin comunicación con la pareja el daño puede ser irreparable.
SEÑALES DE INDIFERENCIA:
Todo lo que solía hacer cuando estaban enamorados ha desaparecido, llamadas, mensajes y detalles.
Por encima de ti están todas sus prioridades, trabajo, amigos, escuela, tú estás al final de la lista.
Cuando hacen planes, cancela o suele no presentarse, después si se lo preguntas te dará un motivo de algo que fue más importante e impostergable.
No muestra interés en lo que sucede en tu día o tus logros.
No te presta atención al platicar, puede estar revisando el teléfono, el periódico u otra cosa que si capta su interés.
Por muy incómodo que te parezca tienes que hablar con tu pareja sobre esto, no puedes permitir que siga pasando. ¿Tienes miedo de que te deje por eso lo soportas? A la larga vas a sufrir mucho.
Cuando en una relación uno de los dos miembros a dejado de amar, no hay nada más que hacer, debes de aceptarlo y seguir adelante, todo está dicho, no te puedes aferrar a alguien que ya no te quiere, nada puede hacer cambiar lo que siente, no puedes forzar a amar.
Por tu salud mental debes de poner un alto a las muestras de indiferencia, no tienes porque soportar eso, si sientes que no puedes vivir sin esa persona, es una señal de que tu autoestima está tan dañada que eres dependiente de esa relación enferma.
“Cuando ya no te quieran, lo sabrás, aunque no te lo digan. Lo sentirás desde lo más profundo porque la indiferencia jamás pasa desapercibida” Walter Riso.
Solamente quien haya pasado por esto puede conocer lo que sientes, es muy doloroso, pero debes de saber que aunque estés con tu pareja, si estás sufriendo en silencio la indiferencia, en realidad es como si ya estuvieras sola, no lo necesitas, esa persona no es imprescindible.